lunes, 8 de julio de 2019

¿POR FIN, DONDE ESTABA LA IGLESIA LA CONCEPCION?


DURANTE TODA MI VIDA, DESDE QUE ME DEDIQUE A INVESTIGAR TEMAS RELACIONADOS A LA HISTORIA NACIONAL Y PARTICULARMENTE REGIONAL, TUVE LA CERTEZA, QUE LA  IGLESIA CONCEPCIÓN HABÍA ESTADO EN EL MISMO SITIO, DESDE EL 5TO O 6TO ASENTAMIENTO DE LA CIUDAD DE BARQUISIMETO. SIENDO MUY JOVEN AUN, EL  MAESTRO HERMAN GARMENDIA ME DIJO, GOLPEANDO CON EL TACÓN DEL PIE "AQUI ESTA ENTERRADO EL TIRANO AGUIRRE",  AQUELLO LO ASUMÍ COMO UNA VERDAD PARADIGMÁTICA, AUN SABEDOR QUE EL MISMO HABÍA MUERTO EN ALGÚN LUGAR CERCANO AL CAMPO DE BÉISBOL DE LA ACTUAL SANTA ROSA Y QUE ERA POCO PROBABLE QUE AQUELLOS ESCASOS ESPAÑOLES, QUE ALLÍ HABITABAN, IBAN A CARGAR CON LOPE DE AGUIRRE AL LOMO, VARIAS LEGUAS AL OESTE Y EN SUBIDA, PARA ENTERRARLO FINALMENTE EN ALGÚN LUGAR DE UNA PLAZA MAYOR, QUE POR SUPUESTO AÚN NO EXISTÍA (OCTUBRE DE 1561).  TELASCO MC. PHERSON Y SILVA UZCATEGUI COMO LAS GRANDES FUENTES DEL SABER REGIONAL ME TERMINARON DE CONVENCER QUE LA ANTIGUA IGLESIA LA CONCEPCION, ALGUNA VEZ CATEDRAL HABÍA ESTADO DONDE SIEMPRE, ES DECIR EN LA ESQUINA SURESTE DE LA CARRERA 16 CON CALLE 26. DICHO DE OTRA MANERA, LA IGLESIA MATRIZ DE ESTA CIUDAD SE ESTABLECE EN SU EMPLAZAMIENTO ACTUAL A PARTIR DE 1562.

SIN EMBARGO, UNA OBRA TITULADA  "1810 - 1830 PRINCIPIO Y FIN DE COLOMBIA EN BARQUISIMETO" DEL MAESTRO Y AMIGO (QEPD) RAMÓN QUERALES, OBRA EDITADA POR EL FONDO EDITORIAL IPASME, 2014, REVELA ALGUNOS DETALLES MUY INTERESANTES, EXPUESTOS POR UN INVESTIGADOR, TAN METICULOSO COMO LO FUE QUERALES. DENTRO DE ESTOS DETALLES, HAY UNO QUE PARTICULARMENTE, HECHA POR  TIERRA LA CREENCIA DE QUE LA DICHA IGLESIA DE LA CONCEPCIÓN, ESTUVO DONDE SIEMPRE (MAS QUE TODO BASADO EN UN PLANO DE BARQUISIMETO DEL SIGLO XVI) PERO QUE ENTRA EN CONTRADICCIONES ANTE LA EVIDENCIA DOCUMENTAL HALLADA POR QUERALES, Y QUE CORRESPONDE AHORA A LA ARQUEOLOGÍA URBANA, CONFIRMAR.
ME TOMO LA LIBERTAD DE TRANSCRIBIR INTEGRO EL CAPITULO DEDICADO A LA  PLAZA MAYOR Y A LA IGLESIA DE LA CONCEPCION, PORQUE NO TIENE DESPERDICIO. ESTO ES LO QUE DICE:

La Plaza Mayor
El espacio urbano de la ciudad colonial española de mayor importancia es la Plaza Mayor. Allí se celebraban los grandes acontecimientos populares; a su alrededor se levantan la iglesia principal, la sede del Cabildo y las viviendas de la gente principal y, como núcleo importante, unifica en su entorno el resto del conjunto urbano y las actividades que se realizan en toda la ciudad y en las zonas de su influencia. Nacimiento, vida y muerte de los habitantes de la urbe de algún modo pasan por el centro que gira alrededor de la plaza mayor. La ciudad republicana conserva el modelo cuadricular utilizado por los fundadores de ciudades del imperio español en América, sobre todo en los grandes centros edificados en el período colonial, que ni la mano del hombre ni el poder de la naturaleza se atrevió a destruir. Pero igualmente, en ciudades como Barquisimeto, que debió construirse nuevamente ya bastante avanzado el régimen republicano, el modelo siguió siendo el de la cuadrícula urbana formada desde la plaza principal a uno de cuyos costados se erigía la iglesia parroquial, primero que nada. Así fue como se restableció en la nueva Barquisimeto la plaza mayor ocupando un terreno de 100 metros cuadrados y al este de ella, calle de por medio la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción. Pero no era eso lo que los barquisimetanos y visitantes modernos veían en el centro de la ciudad, donde hacía el oeste, frente a la iglesia, se levantaban, calle de por medio algunas viviendas. Al norte, veían la plaza Bolívar (que antes había sido denominada Miranda, de la Concepción); y al sur se encontraba una media manzana que la mayoría identificaba como la antigua Plaza Mayor de la ciudad.
LA IGLESIA LA CONCEPCION A FINALES DEL SIGLO XIX (FOTO DE EL COJO ILUSTRADO)
NOTESE LAS ESCALERAS QUE CONECTAN LA PLAZA CON LA CALLE. RECUERDA LA ESQUINA DE GRADILLAS EN LA PLAZA BOLIVAR DE CARACAS.


 Y si era extraño que dicho espacio sólo fuera la mitad de lo que normal y lógicamente son esas plazas mayores (que por espaciosas y céntricas deben denominarse así), más todavía era que estuviera situada no al frente de la iglesia, esto es hacía el oeste, y calle de por medio como generalmente sucede, sino al este, a un costado del templo. ¿Qué razón válida podría haber prevalecido para no darle el espacio acostumbrado a la Plaza Mayor de Barquisimeto, en un terreno que entonces no sólo estaba totalmente desocupado sino que se extendía por leguas tanto al norte como al oeste de donde los barquisimetanos habían decidido fijar el nuevo asiento de su ciudad en 1700? ¿Y por qué iban a construir la iglesia orientada de este a oeste y ponerle, no al frente, sino a su costado sur, un mezquino pedazo de terreno como Plaza Mayor? Las irregularidades urbanísticas aquí apreciadas tuvieron lugar no por mano de los barquisimetanos del siglo XVIII, sino de los reedificadores del templo de Nuestra Señora de la Concepción a mediados del siglo XIX, quienes, víctimas del terremoto de 1812, con muchos esfuerzos y patéticos enfrentamientos periodísticos, reedificaron el templo en el terreno que originalmente fue el de la Plaza Mayor de la ciudad, lo que con la ayuda de testimonios irrebatibles del obispo Mariano Martí y otras reflexiones vamos a comprobar.

CARACAS, EN 1578. FUNDADA EN 1567, APENAS UNOS POCOS AÑOS DESPUÉS DEL ULTIMO ASENTAMIENTO DE BARQUISIMETO (1562) UBICABA SU PLAZA MAYOR AL PONIENTE DE LA IGLESIA MAYOR, COMO ERA LO NORMALMENTE ACEPTADO. (APORTE NUESTRO A LA "TEORÍA  DE QUERALES")


En el admirable recorrido que a finales del siglo XVIII hizo el obispo de Venezuela  doctor Mariano Martí, le correspondió llegar a Barquisimeto a las siete de la mañana del 8 de marzo de 1779. Venía de Bobare y permaneció en Barquisimeto hasta el 17 de junio cuando, por haberse enfermado, regresó a Caracas. De esta visita dejó importantes informaciones sobre el Barquisimeto anterior al terremoto de 1812, recogidas en los volúmenes II, 1988, pp. 70-87, IV, pp. 286-297, V, pp. 312-315 y VI, pp. 381-397 de 1989 de una obra editada por la Academia Nacional de la Historia, con el título Documentos relativos a su visita pastoral de la Diócesis de Caracas (1771-1784). Antes, sin embargo, hay una edición que, con prólogo del  doctor Caracciolo Parra, se publicó en 1928-29, de la cual tomamos la información de Martí, o de su secretario Joaquín Soto, de la distancia existente entre la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Concepción hasta los demás templos de la ciudad: tres cuadras al oriente, San Francisco; cuatro cuadras al poniente, la Paz; y cuatro o cinco cuadras al norte, con derivación al oriente, Altagracia. Hacia el poniente, a poco más de una cuadra, el Hospital de San Lázaro, en una esquina de la plaza principal. Este hospital poseía una iglesia y ambos con sus puertas principales mirando hacia la actual carrera 16, pues los dos estaban orientados de norte a sur. 

PLANO DEL HOSPITAL SAN LAZARO, TAL COMO LO CONOCIO EL OBISPO MARTI  (ORIENTADO DE NORTE A SUR,  CON ENTTADA POR LA ACTUAL CARRERA 16)


 Siempre se nos ha dicho, y así lo escribieron Mac-Pherson en su Diccionario del Estado Lara, 1883 y Eliseo Soteldo en sus  Crónicas barquisimetanas de 1901, que el actual templo de la Inmaculada Concepción, reconstruido y reinaugurado en 1853 por el padre Macario Yépez, se levantó sobre las ruinas del templo que allí existió hasta 1812 y fue destruido ese año por un terremoto. El mismo que visitó Martí en 1779. 
Pero el problema es que si medimos las distancias entre la actual iglesia de la Concepción, esa que vemos en la esquina sureste formada por la actual calle 26 y la carrera 16, no se corresponden con las anotadas por Martí en la relación de su visita a los templos de esta ciudad porque el Obispo trae la siguiente información acerca de la distancia que había entre cada uno de los edificios mencionados y la “Iglesia Parroquial de la Ciudad de Barquisimeto” que coloca como centro para ubicar a los demás templos. Véase lo que dice de cada uno:
Del Hospital de San Lázaro: “Esta edificado este Hospital en una Esquina de la Plaza Principal de dicha Ciudad de Barquisimeto a distancia de una cuadra, poco más de su Iglesia Parroquial Hacia el Poniente…” Del templo N. S. de la Paz: “Esta edificada esta Iglesia Filial a distancia de quatro o cinco cuadras de la supradicha Iglesia Parroquial de Barquisimeto a la parte del Poniente…” 
Del templo de N. S. de Altagracia: “Esta edificada esta Iglesia Filial distancia de quatro o cinco cuadras de la supradicha 
   Estas “quadras” tenían 120 varas de longitud equivalente a la cuadra actual de 100 metros pues una vara equivale a 0,8359 m. 
Iglesia Parroquial de la Ciudad de Barquisimeto a la parte del Norte con declinación al Oriente” 
El Convento: “Esta edificado este Convento a distancia de tres cuadras de la Iglesia Parroquial de dicha Ciudad de Barquisimeto a la parte de Oriente…”. En efecto, desde la iglesia de la Concepción hasta la de la Paz no hay, ahora, cuatro cuadras sino tres; hasta donde estuvo el convento y está ahora la iglesia de San Francisco no hay tres cuadras como dijo Martí sino cuatro; hasta la iglesia de Altagracia (no la de ahora, 2002, sino la antigua situada en lo que es hoy la esquina sureste de la carrera 18 con calle 21) no hay de cuatro a cinco cuadras sino de cinco a seis: y hasta el ya desaparecido hospital no habría “una cuadra poco más” sino que dicho hospital habría estado diagonal a la iglesia reconstruida por Macario Yépez.
2 La imprecisión “quatro a cinco cuadras” posiblemente se debe a que es el trayecto entre la iglesia parroquial y la de Altagracia, que se encontraba el zanjón de Cárdenas hoy Concha Acústica, lo que dificultaba calcular la distancia exacta. 

Como creemos que las informaciones del obispo Martí son incuestionables y merecen el mayor crédito ante estas disparidades tan evidentes, debemos entonces manejar la hipótesis alternativa de que la actual iglesia de la Inmaculada Concepción no se construyó —como lo dicen Mac-Pherson, Soteldo y todos lo creímos— sobre las ruinas del templo destruido en 1812 sino que este templo estuvo en la manzana contigua entre las calles 24 y 25 y las carreras 15 y 16. Sobre la posibilidad de que el templo reconstruido por Macario Yépez lo haya sido en un lugar diferente al que ocupó hasta el terremoto, nada dicen quienes escribieron sobre él en 1856 con motivo de su fallecimiento, aunque varios de ellos mencionan entre las obras importantes del controvertido religioso, dicha edificación. José María Raldíriz, su más cercano colaborador y sacerdote, por ejemplo, dice al respecto: ...apenas el Pbro. José Macario Yépez regresa a esta ciudad, después de concluida su carrera literaria, cuando acomete la ardua empresa de reedificar el templo en donde recibió el signo indeleble de cristiano: muchos años son necesarios para la conclusión de obra tan grandiosa en las manos de un pastor pobre y con los recursos de una población también pobre y, por entonces, no muy numerosa... Explica el padre Raldíriz los inconvenientes que debió sortear Yépez y los esfuerzos que realizó para reunir los recursos materiales de la reconstrucción, y dice: La obra llega por fin a su perfección y logra colocar y bendecir un templo magnífico, suntuoso, que será el ornato y orgullo de los barquisimetanos. Otro que, igualmente, alude a esta obra de Yépez es el abogado trujillano, que entonces ejercía en Barquisimeto, Ricardo Labastida. En nota publicada el 11 de junio de 1856, dice:
Después que, en su calidad de Vicario foráneo, arregló las rentas de la vicaría, destruidas en gran parte por el terremoto y la guerra, contrajo la más grande atención en la construcción del Templo, que constituye el más bello ornato de Barquisimeto. Esta obra ha importado la considerable 
 suma de 83 mil pesos y a excepción de unos 25 ó 30 mil que se tomaron de las rentas de fábrica y limosnas, el resto fue cubierto por los esfuerzos de piedad del Venerable Yépez. El año de 1853 en que fue consagrado el Templo al culto del Señor, pudo decir con Simeón: Nunc jam dimittes Domine Servuum Tuum...;
 el Venerable Yépez estaba adeudado con cerca de 6 mil pesos, que había tomado a interés para la conclusión del templo, que será un monumento vivo de su celo para las generaciones futuras. Ninguno de estos dos contemporáneos de Yépez, testigos presenciales de la reconstrucción del templo, se refiere a lo que nos gustaría saber con absoluta certeza: si dicho edificio se reconstruyó en el mismo lugar del anterior, sobre sus ruinas o si ocupó un sitio diferente como nosotros empezamos a creerlo. Ahora estoy casi totalmente seguro de que el espacio situado, calle de por medio, al frente del antiguo hospital “Antonio María Pineda” y al costado sur del templo, es parte de la Plaza Mayor o Principal del Barquisimeto que visitó Martí en 1779, no la Plaza Mayor pero sí una parte de ella por lo que a continuación expongo: 
1. En una correspondencia de Hilario Sistiaga, jefe político del Cantón Barquisimeto, al Vicario Capitular fechada el 12 de noviembre de 1831, se dice que tanto el Síndico Procurador Municipal como muchos vecinos notables de Barquisimeto, solicitaban la demarcación de una nueva área para levantar la iglesia parroquial “detestando —dice dicha comunicación— el lugar en que se halla principiado desde 1817 sobre los cimientos de la antigua que destruyó el terremoto del año de 1812 por ser un desierto que a distancia de tres cuadras por lo menos en circunferencia, sólo hay dos casas pertenecientes la una al párroco José Antonio Meleán y la otra al Pbro. Mtro. Macario Yépez...”.
 Una comisión que había nombrado el Concejo consideró como razonable esta opinión que, acogida por el gobierno, dispuso que si el párroco [José Antonio Meleán] estaba de acuerdo, se procedería “a designar el lugar en que ha de construirse dicha Iglesia”. Mac-Pherson y Soteldo, caballitos de batalla de la perezosa historiografía local, poniendo estos sucesos en 1838, dicen que se escogió reedificar el convento de San Francisco para iglesia parroquial, pero que el padre Macario Yépez, opuesto a esa idea, se empeñó en hacerlo sobre las ruinas del antiguo templo.
Lo que queremos destacar, sin embargo, de cuanto pueda sugerir la anterior información, es el hecho de que la idea de reconstruir el templo de la parroquia en un sitio distinto al que ocupó hasta 1812, ya se manifestaba en muchos barquisimetanos e incluso obtuvo el visto bueno de las autoridades recogiendo el argumento de que aquella zona era, además de distante de la nueva ciudad, un desierto lleno de ruinas, lo que tiene mucho interés para robustecer nuestras opiniones de ahora. 

2. La polémica de si la iglesia parroquial se levantaba sobre las ruinas del antiguo convento franciscano o sobre las de la colonial iglesia parroquial se agudizó hacia 1842, expresándose agriamente en los periódicos de la época tanto locales como de Caracas. El 7 de diciembre, “El Liberal”, diario capitalino, un grupo de barquisimetanos se opone a las pretensiones del Padre Yépez por considerar que “todos estos tránsitos están llenos de paredes desplomadas que amenazan quitar la vida del transeúnte: están habitadas de célebres mapanares de grande magnitud”. El párrafo donde da cuenta de las casas que lograron resistir el terremoto es en verdad digno de tomar en cuenta; al enumerar las viviendas hablan de “DOS SITUADAS EN LA PLAZA, la del Sr. Vicario, de esta ciudad y la del prebendado Sr. José Antonio Meleán; y en las calles inmediatas ninguna, ninguna a menos que [se] llame casa a los escombros…”. Estas casas de Meleán y Yépez resistieron efectivamente el terremoto y estaban ubicadas, hasta bastante avanzado el siglo XX, la del padre Yépez frente a la iglesia de la Concepción, calle de por medio, en el terreno que hoy ocupa la Torre David; y la de Meleán en la esquina suroeste de la calle 26 con carrera 15. De la de Yépez, conocida después como Palacio Episcopal, habla en su Plano Histórico de Barquisimeto, publicado en 1877, Gumersindo Giménez: El edificio que hoy es el palacio episcopal quedó en pie en el terremoto de 1812. En él estableció el Pbro. Mtro. Yépez en 1828 una clase de latinidad que se conservó por algunos años. En 1833 estableció allí el mismo Mtro. Yépez su memorable escuela de latinidad y primeras letras.





EL MISMO EDIFICIO .

En “El Liberal” citado se dice que estaban “situadas en la plaza”, lo cual vendría a probar, ya sin género de dudas, que el terreno que ocupa actualmente la iglesia de la Concepción, fue el perteneciente a la Plaza Mayor hasta 1812 y después se usó para reconstruir la iglesia parroquial, batalla ganada a “los conventuales” por Macario Yépez. 3. Nos llama mucho la atención que el más antiguo nombre de la calle 25 sea el de Concepción, pues no es lógico que se le dé nombre de un templo, más grave aún si es nada menos que el parroquial, a una calle que pasa por su lado posterior tal como sucede con esta calle barquisimetana. Si el templo estuvo siempre donde ahora se encuentra la calle de la Concepción debería haber sido la calle 26 por pasar frente a la iglesia. Es lo lógico y acostumbrado. 4. Por documentos que pueden consultarse en el Registro Principal del Estado Lara conocemos que en la esquina noroeste de la calle 26 con carrera 16, se encontraba el hospital de San Lázaro. Nieves Avellán de Tamayo (La Nueva Segovia de Barquisimeto, 1992, p.209) cita uno de esos documentos por medio del cual el general Jacinto Fabricio Lara vendió en 1881 el “solar de ejidos” (sic) que perteneció al hospital de San Lázaro, pone por dirección del mismo la calle La Paz y da los siguientes límites: por el naciente Plaza Guzmán Blanco, calle del Obispo por medio; por el poniente casa de Josefa Astudillo; por el norte, solar en fábrica de Leopoldo Torres y por el sur, casa de los herederos del finado Lorenzo Bernal, calle de La Paz por medio.
 Este solar tenia 45,5 metros de frente y treinta metros de fondo, lo que indica que era apenas un remanente del antiguo solar del hospital; pero lo que interesa destacar es su ubicación: carrera 16 (calle La Paz) con calle 26 (calle del Obispo). Es decir si la iglesia de la Inmaculada Concepción estuvo siempre donde está ahora, no puede ser posible que este hospital, como lo dijo el obispo Martí, estuviese a una cuadra hacia el poniente de dicha iglesia pues lógicamente estaría diagonal a ella en la esquina noroeste del mismo crucero de calles La Paz (carrera 16) y Obispo (calle 26). Con base en las precedentes consideraciones, bastante razonables además, es por lo que pensamos que la iglesia debió estar en la manzana ubicada ahora hacia el este de la iglesia de la Concepción; y de ser así, cosa que creemos muy bien fundamentada, podrían proponerse las siguientes conclusiones: 
1. Las distancias de la parroquial a los templos La Paz, San Francisco, Altagracia y al hospital son como lo dice el obispo Martí; 
2. La Plaza Mayor o Principal estaba en la manzana limitada por las calles 25 y 26 y las carreras 15 y 16; 
3. La iglesia de la Concepción fue reconstruida por el padre Macario Yépez sobre una porción de la Plaza Principal; 
4. El espacio libre situado al costado de la iglesia de la Concepción y al norte del museo de Barquisimeto, carrera 15 por medio, no es la que fue Plaza Mayor de la ciudad hasta 1812, pero sí una parte de ella;
5. La investigación documental deberá verificar ahora en los archivos del Registro Subalterno de Barquisimeto si en las manzanas limitadas por las carreras 15 y 16 y divididas por las calles 24 y 25 una, y 25 y 26 la otra, había viviendas. Seguramente no, por la sencilla razón de que en la primera estaba la iglesia y en la segunda, al oeste de la iglesia, al frente de ella, estaba la Plaza Mayor o Principal;
6. El nombre antiguo de la calle 25 era Concepción porque pasaba frente a la iglesia consagrada a esa imagen de María.

segun la teoria de Querales,  la iglesia de la Concepcion, estuvo ubicada mas o menos, donde se ubica la casa  que se muestra  del lado izquierdo en esta grafica, siempre orientada de oeste a este, con frente al oeste.

No se recoge mayor información sobre otras plazas existentes en el Barquisimeto destruido por el terremoto de 1812, pero en algunos documentos se menciona “la plaza del Convento”, que sería la actual plaza “Lara” y antes plaza Bolívar. Seguramente frente a la iglesia de La Paz existió una plaza pero ignoramos si la actual plazoleta allí existente con el nombre de Plaza Wonhsiedler es parte de ella o lo que desde siempre existió frente a la iglesia.
Por la escritura de venta de una vivienda consta que frente a la iglesia Altagracia, situada en lo que ahora es la carrera 18 con calle 21, acera suroeste, existía una plazuela a cuyo norte se levantaban casas no sabemos si construidas con posterioridad al terremoto o porque ellas no fueron afectadas por éste, lo que pudo ser pues los barquisimetanos que vieron destruidas sus viviendas se refugiaron en dicho barrio llamado Paya, tal como lo afirma el patriota Francisco Javier Yánez, quien conoció a Barquisimeto antes de su destrucción.

 Después del terremoto se trasladó la ciudad al barrio que denominan de Paya y sus casas son de bajareque con algunas calles mal arregladas y la mayor parte de los vecinos habitan en el lugar que llaman Cautare [hoy Cabudare], en las llanuras bajas del río una legua distante de la antigua ciudad. Casas de bahareque habitadas por negros, pero eso no importó a los orgullosos blancos barquisimetanos que, para cobijar momentáneamente sus desamparadas vidas, o se fueron a Cabudare (Cautare según Yánez) o se instalaron en Paya, donde al menos quedaba en pie la iglesia de Altagracia para brindarles consuelo espiritual y, frente a ella, la pequeña plaza del mismo nombre con frentes descubiertos hacia la ahora calle 22 y carrera 17. 




1 comentario:

  1. Interesante historia, Ahora bien, donde esta enterrado el tirano aguirre,enque parte lo señalaron.

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